Nuestra estadía fue de locura en el "Hostel de las bicis"! Visitamos el famoso Templo de Oro y el impresionante Castillo de Nijo en nuestras bicis. Nos sentimos como auténticos samuráis recorriendo la ciudad. Además, el personal del hostal fue increíblemente divertido y amable. Nos ayudaron con todo, desde recomendarnos los mejores lugares para comer ramen hasta organizar nuestras aventuras en Kioto.

Lo único que nos hubiera gustado es que el hostal organizara más actividades nocturnas para jovencitos como nosotros. ¡Nos encantaría haber tenido algunas fiestas temáticas o noches de karaoke para disfrutar aún más de la vida nocturna de Kioto!

Nuestra habitación era casi perfecta y auténtica con tatamis, camas cómodas. La ubicación era buena y estupenda - a poca distancia de todos los lugares a los que queríamos ir. El local Restaurant & Bar Kazahana estaba cerca, ahí íbamos a relajamos.

La habitación es enorme y tranquila, cuenta con tatamis y camas cómodas. Personal increíblemente amable, conocen su negocio. La ubicación es perfecta y excelente, a 2 km está el Castillo Nijo.

El hotel estaba muy limpio. La habitación era auténtica y ordenada con esteras de tatami y camas cómodas. La decoración del hotel era japonesa. La ubicación era estupenda, cerca de una estación de tren, del centro y de los principales atractivos turísticos.

Las habitaciones tienen esteras de tatami y camas súper cómodas. El personal es muy atento y la ubicación es tranquila y conveniente. Además, es un lugar muy acogedor donde te sientes como en casa. 🌿

Desayuno incluido rico y variado, personal encantador y atento, ubicación conveniente con transporte cercano.

Me sentí como en casa, no tuve ningún inconveniente.

Todos sin excepción eran muy serviciales y cuidadosos. La habitación era impecable y moderna, el baño era enorme. - Hay un salón y una cocina en el dormitorio. - La ubicación era tranquila respecto a la mayoría de los destinos turísticos, en una zona segura. - El barrio de Shimogyo merece ser explorado. He disfrutado mucho de este hotel perfecto. Todos, sin excepción, fueron muy serviciales y atentos. La habitación era impecable y moderna, con un baño enorme. Además, cuenta con un salón y una cocina en el dormitorio. La ubicación es tranquila en comparación con la mayoría de los lugares turísticos, en una zona segura. El barrio de Shimogyo es digno de ser explorado. Mi estadía fue realmente agradable, ¡me encantaría volver!

Personal encantador y atento! Desayuno delicioso con variedad. Limpieza perfecta. Tamaño acogedor, ambiente familiar. 💯💕

Increíble! Mi estancia en Fujitaya fue perfecta. Las habitaciones estaban impecables y tranquilas, ideal para descansar. Me encantó el ambiente y el hecho de que esté ubicado en una zona residencial. El personal fue muy amable y servicial. El desayuno, aunque no muy variado, estaba delicioso. En general, recomendaría este hotel sin duda alguna.

Las habitaciones eran geniales, tenían camas muy cómodas y además esterillas de tatami 😄.

Las mejores aspectos de mi estadía fueron la limpieza impecable, las instalaciones modernas y completas, la ubicación conveniente junto al metro y la amabilidad del personal. El desayuno incluido era suficiente y delicioso, y el personal siempre estuvo dispuesto a ayudar y proporcionar recomendaciones sobre qué hacer en esta ciudad tan hermosa.

Llegamos desde el aeropuerto en un rápido viaje en tren expres, ¡sin inconvenientes! Además, nos quedamos maravillados con la belleza natural de los alrededores, como el hermoso Lago Biwa y el encantador Parque Umekoji. Sin duda, un lugar perfecto para relajarse y disfrutar de la serenidad de la naturaleza.

Distancia de la estación.

Me encantó la decoración tradicional del hotel, con sus hermosos tatamis y pantallas de papel. Las áreas comunes eran muy acogedoras y bien cuidadas, perfectas para relajarse y disfrutar de la tranquilidad. Además, me alegré mucho de que el hotel contara con rampas y ascensores, lo cual facilitó mucho mi movilidad como persona mayor.

Me hubiera gustado que hubiera actividades o servicios específicamente diseñados para personas mayores, como clases de yoga o excursiones menos exigentes. Aunque los niños que trabajan allí fueron muy amables, creo que sería bueno tener opciones más adecuadas para nosotros los mayores.

Lugar limpio y acogedor, con desayuno básico pero cocina bien equipada. Cerca de la estación Tambaguchi y paradero de buses. Tranquilo y respeto por el silencio. Toallas incluidas en la habitación.

Me sentí muy relajado, no tengo ninguna razón para quejarme.

Excelente ubicación en Kyoto. Ayuda con reserva de actividades. Noche de sushi con el dueño. Personal atento y amable. Agradable desayuno incluido. Transporte cercano y conveniente. Baños y ducha estupendos. Cama cómoda para 4.

Imposible encontrar algo.